Esta es la historia de 2 aventureros de alma.
2 personas de lugares muy distintos del mundo, pero que un día se cruzaron en el mapa.
Y que, tiempo después y sin pensarlo demasiado, decidieron darle un giro a sus vidas y lanzarse a la gran aventura de sus vidas.
Antes de la Panamericana
Eka nació hace 29 años en el País Vasco. 3 años después, muy lejos de ahí, en Haití, nacía Meli.
Siendo de lugares tan lejanos, pocas eran las chances de que nuestros protagonistas se cruzaran. Pero el destino (o quién sea) así lo quiso, y Ciudad de Panamá fue el punto del mapa donde se encontraron en 2016, adonde Meli recién había llegado y Eka trabajaba hacía un par de años.
Sin embargo, después del flechazo inicial y un par de aventuras juntos, Meli debía regresar a París, donde estaba estudiando. Así fue que siguieron meses de una relación a distancia.
Pero fue al final de los estudios de Meli cuando finalmente se reencontraron y pusieron en marcha una nueva travesía, la más grande (hasta ahora): viajar desde Panamá hasta Alaska en un camper.
Contaban con la ventaja de ser ambos viajeros experimentados: Meli había hecho incluso un viaje de un mes en carro por Australia, y Eka ya se había tomado un año sabático 10 años atrás para dar la vuelta al mundo en modo mochilero.
Sin embargo, este viaje planteaba un nuevo desafío: no solo por la modalidad y las nuevas rutas, sino porque también significaba comenzar a convivir, y en un espacio reducido.
Comienza la aventura
El Instagram de Meli y Eka es un reflejo de su amor por la naturaleza y de las aventuras de su viaje por la Panamericana.
Estos viajeros han encontrado en esta ruta tierras incontables para dar rienda suelta a sus ganas de embarcarse en nuevas aventuras.
¿Y sus lugares favoritos? Sus destacados incluyen cascadas como las de Bajos del Toro (Costa Rica) y Roberto Barrios (México), playas paradisíacas en Isla Coiba (Panamá) y la costa de Oaxaca (México), volcanes que quitan el hipo como en el Acatenango (Guatemala) o el Masaya (Nicaragua).
Viajan en una camioneta con un camper, y financian su viaje con ahorros y a través de trabajos online, como traducciones y grabaciones de drone.
Si bien destacan lo bien que la han pasado, también se han tenido que enfrentar a los típicos desafíos de la ruta: desde una inundación en Nicaragua hasta haber tenido que cambiar la camioneta después de que se les rompiera en México.
Más allá de esto, han seguido siempre adelante, y recientemente, después de más de un año de viaje y aventuras, han cruzado la frontera final de su viaje: la ingobernable Alaska.
Después del viaje
Desde que comenzaron su viaje en Panamá 13 meses atrás, Eka y Meli han viajado juntos por 10 países, que lucen orgullosos en sus stickers de banderas a un lado del camper.
Además, pasaron de ser 2 a 3: en México se unió la pequeña Tikla, una cachorrita que adoptaron en Michoacán y que pasó a ser la nueva integrante de la familia Ohlavan.
En todos estos meses, han aprendido de mecánica, historia y geografía centroamericana, cómo cepillarse los dientes con dos gotas de agua o que son capaces de sobrevivir una semana sin ducharse.
¿Y la convivencia?
Conocerse mejor es algo que destacan como un aprendizaje del viaje. «Comenzamos el viaje cuando llevábamos 7 meses de relación», dicen, «y pasamos de vivir a 8000 km de distancia a convivir en un espacio de 12m2 y hasta el momento, ¡nos soportamos bastante bien!».
Las aventuras para esta pareja recién están empezando, de eso no hay dudas.
Podés seguir el viaje de Meli, Eka y Tikla en Instagram y su página web.
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«No hay un solo día en que nos arrepintamos de haber comenzado este viaje. Fue una decisión meditada que nos ha hecho muy felices, y sabemos que marcará un antes y un después en nuestras vidas. Es por ello que animamos a todo el que esté en duda a dar el paso y comenzar esta gran aventura».
